Hemos asistido a un esperpento entre Rajoy y Rubalcaba. Se han dedicado a citarse mutuamente y con eso nos han vuelto a demostrar que Rajoy y Rubalcaba no son sino dos versiones de un mismo sistema que no nos quiere ni como trabajadores ni como vascos.

Una vez más ha aparecido ante la opinión pública un Estado corrupto. La corrupción no es un fallo del sistema, es el sistema. Un sistema en el cual los grandes intereses financieros sobornan masivamente a los dos grandes partidos españoles para obtener a cambio concesión de obra pública. Y la cuantía de esos sobornos se paga de nuestros bolsillos, de dinero público,en detrimento del gasto en políticas sociales.

La recentralización del modelo de Estado, la imposición de un sistema educativo, incluso de las lenguas que se pueden o no utilizar; todo eso es Marca España. Un sistema político corrupto en sí mismo, la imposición de la identidad española, el desmantelamiento de las políticas de cobertura social, todo eso es Marca España.

Los vascos y vascas no tenemos cabida en un Estado que tampoco nos quiere. Es el momento de irse y evitar que su podredumbre política y económica nos arrastre. Otros ya han dado pasos en esa dirección: los escoceses tienen una cita el año que viene para decidir si son independientes; los catalanes van por el mismo camino. Nosotros queremos emplazar el PNV a remar también en esa dirección, en defensa del derecho a decidir como suelo básico democrático para poder construir una nación libre.

Si el PNV apuesta por empoderar a la sociedad vasca y así pueda decidir libremente su futuro, contará con la colaboración leal de la Izquierda Abertzale: pero atención, sin exclusiones, todos los vascos y vascas debemos ser sujetos de ese ejercicio; y el objetivo no debe ser buscar un nuevo modelo de relación con Madrid, no se trata de buscar fórmulas para seguir en España sino para poder salir de España y que los vascos y vascas podamos construir un nuevo futuro como Estado libre dueños de nuestro futuro. Ésa es la apuesta y no otra.