El Estado español tenía una hoja de ruta clara con Bateragune: imposibilitar el debate que llevaría a la Izquierda Abertzale al cambio de estrategia, pensado para materializar su proyecto independentista solo por las vías democráticas. Pero Madrid erró de pleno, porque la Izquierda Abertzale continuó con el camino marcado por su militancia.

Sortu piensa que en esta hoja de ruta estuvieron y siguen de la mano PP y PSOE, gestionando los mismos objetivos y planteamientos, que se resumen en hacer inviable el proceso puesto en marcha por la Izquierda Abertzale y el movimiento soberanista de este país. Le tienen auténtico pánico a la resolución democrática del conflicto y siguen boicoteándolo de todas las maneras posibles: con la Guardia Civil, en las cárceles, con la participación de la Audiencia nacional, del Tribunal Constitucional, a través de la represión… siguen dispuestos a todo para que la nueva fase abierta no pueda avanzar, y todo esto por una razón muy simple: porque no tienen una oferta democrática para nuestro pueblo.

Todo este tiempo los enemigos de la paz han demostrado sobrada capacidad para hacer daño, pero ninguna detención ni acción represiva podrá detener nuestra determinación para recuperar todos los derechos que como pueblo nos corresponden. Ni antes ni ahora, el Estado español y el Estado francés no nos moverán ni un milímetro de nuestro camino. Lo demostramos hace siete años, y hoy lo corroboramos: nuestra brújula marca el camino a seguir para conseguir la independencia y recorreremos dicho camino de la mano de la ciudadanía de nuestro país.

Para finalizar, Sortu exige el fin de todas las decisiones judiciales y represivas que tienen como objetivo boicotear el proceso abierto en nuestro país.