En la breve reflexión que Sortu hizo pública el pasado 25 de febrero, expresamos nuestra preocupación ante los acontecimientos políticos que estaban teniendo lugar en esos momentos en Ucrania.
Considerábamos que; además de estar en entredicho la legitimidad de las nuevas autoridades de Kiev, la participación de la extrema derecha en ese "gobierno" y su agenda política excluyente, suponían un riesgo de agravamiento del conflicto.
Desafortunadamente, nuestras preocupaciones se han hecho realidad y no se ha desarrollado en el país un verdadero proceso democrático integral. Por el contrario, la situación de tensión política y confrontación ha aumentado y la voluntad de la mayoría de los ciudadanos de las zonas al sur y al este de Kiev no ha sido respetada.
Aunque era predecible, la movilización y la intervención de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa, no es aceptable. Queremos denunciar esa intervención. Los puntos de vista y las acciones militaristas difícilmente traerán nada bueno en el camino para superar la situación de conflicto.
Por otra parte, queremos denunciar también la irresponsabilidad política de la UE y los EE.UU, que no han sido capaces de poner freno al peligroso camino político tomado por las nuevas autoridades de Kiev y en general han apoyado su agenda política.
Sortu reafirma que tanto en Ucrania como en cualquier otro país, la soberanía de los pueblos y el debate democrático deben ser la clave para la resolución de los conflictos existentes. Sin ningún tipo de intervención externa.
Los intereses geo-estratégicos, no pueden estar de ninguna manera, por encima de los procesos democráticos. En ese sentido, Sortu considera que el derecho a decidir libremente su futuro de la República Autónoma de Crimea debe ser reconocido. No se puede poner límites a la expresión de la voluntad democrática de los pueblos, siempre y cuando se respeten todos los derechos civiles y políticos de todos los ciudadanos.
En el caso de Crimea, el referéndum que se celebrará el 16 de marzo, así como la aplicación de sus resultados, debe respetar los derechos y la participación de todos los ciudadanos y de manera especial los del pueblos tártaro.
Ante la discusión sobre la legalidad de ese proceso de toma de decisiones, queremos recordar que las relaciones entre los pueblos deben entenderse desde la horizontalidad y el respeto a la aplicación democrática del derecho de autodeterminación. En ningún caso, mirando sólo los intereses geopolíticos y económicos del momento.
La tensión política que se ha desatado en Ucrania y en los países vecinos, puede tener consecuencias graves si las partes, tanto internas como externas, no actúan con responsabilidad. El riesgo de un enfrentamiento civil y armado está sobre la mesa. Por ello pedimos a todas las partes que tomen medidas para impedir que esto ocurra. El futuro de todos los europeos está en peligro.
Como ya adelantamos en la reflexión del 25 de febrero, desde Sortu pedimos a todas las fuerzas externas a Ucrania que cesen en su injerencia política en el país. Su intervención debe limitarse a facilitar un proceso de discusión democrática, dejando a un lado los intereses geopolíticos.
En estos momentos críticos, en Sortu consideramos que todos los ciudadanos y agentes políticos de Ucrania y de Crimea deben actuar con responsabilidad, luchando para que las discusiones actuales se desarrollen bajo coordenadas democráticas.
Euskal Herria, 13 de Marzo de 2014.