En primer lugar, queremos expresar nuestra más profunda solidaridad con las personas detenidas y sus familiares, y nuestro reconocimiento por el trabajo que, desde Herrira los y las detenidas llevan a cabo en defensa de los derechos de los presos y presas vascas.
Dicho esto queremos señalar la gravedad de la operación policial que ayer se puso en marcha y que va absolutamente unida al nueva tiempo político abierto en Euskal Herria. El tiempo de construir la paz y la convivencia democrática para nuestro pueblo.
Para abrir este nuevo tiempo, han sido muchos y determinantes los pasos dados y las dinámicas abiertas por la izquierda abertzale y por otros agentes. El compromiso de quienes queremos justicia, paz y democracia para este pueblo han hecho posible este nuevo tiempo.
En cambio, PP y PSOE están saboteando de forma continua este nuevo tiempo y con ello las oportunidades para la paz. Estos dos partidos y sus sucursales vascas, empezando por el gobierno de Zapatero y terminando por la última operación policial de Rajoy de ayer, siempre han actuado como enemigos de la paz.
La operación contra Herrira de ayer se enmarca en esta estrategia de PP y PSOE que queremos denunciar de manera contundente.
El estado español ha dado un paso cualitativo con este operativo, agrediendo directamente al proceso de soluciones y a la reivindicación de los derechos de los presos que tan extendida está en nuestras calles.
La respuesta, por lo tanto, a esta agresión ha de ser acorde a su gravedad. Una respuesta popular y firme. Al sabotaje político del PP hay que responderle con el plante democrático, desde las instituciones a la calle, pueblo a pueblo. Hemos de decir alto y claro que ya basta, que no vamos a permitir más represión.
No ha sido esta la respuesta, sin embargo, que han dado algunas instituciones vascas. Así, mientras el gobierno de Nafarroa aplaudía la operación policial, el de vascongadas la denunciaba con la boca pequeña, uniendo a la violencia de la guardia civil la violencia de su Ertzaintza. La prueba de ello es su comportamiento de ayer tarde, cuando cargó contra las personas congregadas en apoyo a los detenidos provocando varios heridos, entre ellos la senadora de Amaiur en Madrid Amalur Mendizabal.
Los mismos que agredieron y golpearon ayer a Amalur Mendizabal, fueron los que mataron a Rosa Zarra y a Iñigo Cabacas. De esa manera, Sortu cree necesario y urgente que la Ertzaintza deje de ser una policía política y lleve a cabo su propio desarme represivo. Que la Ertzaintza, de una vez por todas, deje de ser un instrumento de la estrategia de guerra del estado.
Los responsables de las instituciones de Euskal Herria deben de tomar medidas para que operaciones como las de ayer no vuelvan a ocurrir y, defendiendo así los derechos de los y las ciudadanas. Y es que, el Lehendakari que no defiende los derechos de sus ciudadanos no merece ser Lehendakari.
Por último, queremos hacer un llamamiento a toda esa ciudadanía, para que en este momento en que quieren sacar de las calles y castigar la reivindicación de los derechos de los y las
presas, lancemos ésta a los cuatro vientos. Salgamos a la calle y llevemos a todos los rincones la exigencia de "Euskal Preso eta Iheslariak Etxera". Y en ese camino tenemos una cita a la que no podemos faltar el próximo sábado, día cinco en las calles de Bilbao.