Sortu considera que la eliminación de la "División Antiterrorista" de la Ertzaintza es un paso en la buena dirección de cara a la normalización política y democrática del país. Esta decisión se ha tomado cuando han transcurrido dos años de la decisión de ETA de cesar definitivamente su actividad armada y cuando en Euskal Herria nadie duda de que la única violencia que sufre nuestro país proviene del Estado español y sus aparatos.
De este modo, Sortu anima al PNV a seguir dando pasos en la misma dirección, con el fin de completar el desarme represivo de la Ertzaintza como demanda desde hace tiempo la mayoría social vasca.