Los carteles que exponemos ante la Delegación del Gobierno español recogen los contenidos de los artículos 1º, 2º, 8º y 135 de la Constitución española.
Estos artículos resumen a la perfección la esencia de la Constitución española de 1978: Una esencia anti-democrática cuya base es la imposición.
Los tres primeros artículos mencionados anulan nuestra identidad nacional y el derecho a decidir nuestro futuro, y lo hacen mediante la amenaza de las armas y la violencia.
El articulo 135, añadido por PP y PSOE a una constitución que era "inalterable", nos encadena también como personas, imponiéndonos como prioridad el pago de la deuda decretado por la Troika.
La Constitución española nos encadena como pueblo y como trabajadores e hipoteca nuestro y futuro.
Urge más que nunca romper las cadenas que nos amarran al marco constitucional. Para ello, es imprescindible que todos los partidos, sindicatos y
organizaciones sociales que apuestan por el reconocimiento nacional de Euskal Herria y la puesta en practica del derecho a decidir avancemos en la vía vasca hacia la soberanía.
No es solo un derecho, es urgente que Euskal Herria sea plenamente soberana y que a través de un Estado propio alcance la justicia social. La independencia es el futuro.